viernes, 8 de agosto de 2014

SMATA y automotrices, una sociedad íntima que produce ganancias sin freno

La quinta jornada nacional de lucha impulsada contra los despidos y suspensiones en Lear que se desarrolló hoy, estuvo precedida por el anuncio de la autopartista yanqui de que cerrará sus puertas por quince días como parte de la resistencia que viene haciendo a permitir el reingreso de los delegados, resolución adoptada -con una parsimonia exasperante- por el Ministerio de trabajo después de un mes de negativa de la empresa a permitir el ingreso de los mismos, y veinte días después de la asamblea trucha del SMATA donde la lista Verde buscó destituir a los delegados de la lista Celeste. 
En la jornada de hoy, el gobierno volvió a mostrar que, cuando de laburantes de este gremio se trata, no tiene ningún prurito en arrojar todo el peso de las fuerzas represivas. Con el agregado de que en esta ocasión detuvieron a la nieta restituida Victoria Moyano. Esto ocurría en el mismo momento en el que Guido Carlotto daba la primer conferencia de prensa después de que se conociera que es nieto de Estela de Carlotto. Junto a ella fueron detenidos el presidente del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos, Guillo Pistonesi, al legislador electo por el Frente de Izquierda de la Ciudad de Buenos Aires, Patricio del Corro, y a la docente de la UBA investigadora del CONICET y luchadora por los derechos de la Mujer en la agrupación Pan y Rosas, María Chaves.
La heroica lucha de los trabajadores de Lear enfrenta a la Santa Alianza de patrones, burocracia sindical y gobierno "nac & pop". Desde el comienzo fue evidente que el enconado ataque se debe a la urgencia por barrer al activismo y la izquierda de este sector, donde la conducción del SMATA y las grandes automotrices y autopartistas están acostumbradas a hacer y deshacer a su antojo, con aval del gobierno, y no están dispuestos a permitir que la lucha obrera afecte las conquistas patronales en las condiciones laborales (ultraflexibilizadas aunque esto vaya acompañado de sueldos comparativamente altos).
En Ideas de Izquierda 12 ponemos la lupa sobre las transformaciones recientes ocurridas en el entramado automotriz y aupartista, que han redundado en "Ganancias sin freno" para los principales actores de la cadena acompañadas de un abatimiento de los costos laborales al mismo tiempo que de una intensificación de los ritmos de trabajo. Esta reorganización del sector fue acompañada por la introducción de numerosos cambios en los convenios laborales, que agravaron la inestabilidad laboral y facilitaron los ajustes en las horas trabajadas y en los salarios brutos pagados según los vaivenes del mercado y la producción. La conducción del SMATA se mostró pionera en el "noventismo" laboral, como analizamos en "Sirviendo al capital". 
Desde el lunes la revista se consigue en los quioscos de CABA y GBA, y también en El Instituto del Pensamiento Socialista Karl Marx (Riobamba 144 - CABA). En la semana llega al resto del país (también se consigue en quioscos, averiguar por FB).

domingo, 3 de agosto de 2014

El default de los pagadores seriales, ¿Cómo sigue?

Gastón Ramírez

Estimado lector, van unas líneas sobre la situación con los fondos buitres desde la entrada del país en default el miércoles pasado. Sepa disculpar, aunque sea domingo, el frenesí financiero y sus consecuencias sobre la vida de millones en el país bien valen una actualización de fin de semana.
Luego del fracaso de las negociaciones entre el gobierno y los fondos buitres en litigio que no ingresaron al canje de 2005 y 2010, el país entró en default al sostenerse la sentencia del juez Griesa, por la cual se obliga al gobierno a pagar a estos fondos, y en caso de no hacerlo, bloquea la posibilidad de seguir pagando a los bonistas (también buitres) que aceptaron el canje anterior y que tienen sede de cobro en USA. El ministro Kicillof fue el que primero pegó el grito en el cielo acusando, una vez más, al juez Griesa y a su intermediador Pollack de jugar a favor de los buitres, como si la justicia de USA podría ser favorable a un país atado a los intereses financieros y económicos de las multinacionales yanquis, entre otras. Un mismo discurso, que retomó Cristina en su cadena nacional del jueves, para luego terminar afirmando que el mismo gobierno está dispuesto a pagar a los buitres lo que reclaman, reconociéndoles una ganancia del 300%, ni más ni menos. De fondo el problema aducido para pagar ahora, es la clausula RUFO sigla en inglés para Derechos Sobre Futuras Ofertas), que habilitaría al conjunto de los bonistas que tienen bonos de los canjes previos a iniciar nuevos reclamos y juicios exigiendo una mejora en el pago lo cual gatillaría la deuda en montos que se estiman en no menos de 100 mil millones de dólares.
Ante esta alternativa, el gobierno-con internas entre sus funcionarios- se arrimó hacia el camino del default selectivo. Los bonos bajo jurisdicción norteamericana, en dólares, están alcanzando ese estatus en opinión de las agencias de calificación de riesgo (incluso la agencia China Dagong le bajó la calificación a la deuda). Ahora se abre un período de negociaciones ya que los bonistas defaulteados por las claúsulas del canje en condiciones de reagruparse (con un piso de 25%) para exigir mejoras en los pagos ya programados de la deuda (aceleración en la jerga financiera).
Otra cuestión que empieza a disiparse es el carácter de la negociación entre bancos privados como ADEBA encabezado por el banquero Brito y la banca internacional para comprar la deuda de los bonistas en juicio para evitar el default y buscar un arreglo con el gobierno argentino que en última instancia es quien va a pagar. Por un lado, Kicillof el miércoles reconoció la existencia de esta negociación, aunque por el temor a la clausula RUFO, midió sus palabras dejando en claro que era un acuerdo entre privados y que el Estado no iba a poner plata ahí. Ahora el viceministro de economía sale a decir que “el acuerdo de ADEBA con los buitres fue una maniobra mediática”. Por el otro, Vanoli anunció una denuncia en la CNV contra los bancos por supuestas maniobras especulativas (como si estas solo empezaron ahora). Analistas cercanos al gobierno, plantean que las agencias financieras y bancos internacionales difundieron la existencia de una negociación para evitar que el precio de los bonos argentinos se desplomen y así pagar menos seguros de deuda. Pero esta versión queda corta, ante la nómina publicada por el Cronista (ver acá), en la cual se puede ver a bancos como el JP Morgan (quien decían encabezaba las negociaciones por un acuerdo entre privados), dentro de los que votaron por el default. Lo cual habilita a que entren en juego los seguros de deuda que se aplican sobre la diferencia entre el valor nominal del bono y lo que realmente vale en el mercado.
En realidad, el intento de buscar un Plan B con la banca nacional fue ideado desde un sector del gobierno que lo emparentan con el titular del BCRA Fábrega y Capitanich, quienes fueron luego desautorizados por Cristina y Kicillof en la interna que hay en el ministerio de economía desde diciembre último. El cálculo de Fábrega era lograr un acuerdo por medio de la banca para evitar el default y la activación de la clausula RUFO, y así habilitar la llegada de dólares que tanto necesita el país. En los cálculos de Kicillof primo la mesura ante el enorme temor de que se active la RUFO y disparar una situación de nueva deuda inmanejable, en un contexto internacional donde hay tendencias hacia una suba de las tasas de interés referencia de la FED en el mediano plazo lo cual sería un camino de ida (vuelta) al "infierno" tan temido en tiempos de Néstor.
Aunque la posibilidad de un acuerdo entre privados parece más remota, existe una negociación en juego, que ahora se da con los mecanismos de activación del default parcial en marca. Estas negociaciones, así como las atribuciones que Griesa se tomaba más allá de su jurisdicción, explican que el viernes haya autorizado el pago a bonistas en euros que tienen jurisdicción en Argentina como lo hizo con el Citibank que pagó bonos de la deuda con Repsol y con bonistas de los canjes de 2005 y 2010. Una especie de “goteo” de la clasula pari passu por la cual, la justicia de Griesa frena el pago a los buitres con bonos de legislación en USA. Y para reafirmar el compromiso con todos los buitres el gobierno anuncia que va a presionar jurídicamente al Bank of New York para que pague a los bonistas a los cuales les depositó más de 500 millones de dólares, confirmando su vocación de pagadores seriales.
Así toda la gesta patriótica de pacotilla montada sobre el conflicto con los buitres, comienza a desmoronarse, dejando al descubierto que por más que pagaron serialmente más de 193 mil millones de dólares a los buitres, estos siguen sometiendo al país con más fuerza que nunca. Pagar no es la opción, para ganar soberanía, como intentaron los funcionarios e ideólogos del gobierno difundir con toda esta opereta de flojos actores.

Ahora es cuando, debemos exigir que se abra una consulta popular vinculante como ha reclamado el diputado nacional delFrente de Izquierda, Nicolás del Caño, para que sea el pueblo el que decida que se hace con la deuda y no una camarilla de funcionarios que defienden los intereses de los capitalistas y los funcionarios.

jueves, 31 de julio de 2014

Default o no default, esa NO es la cuestión


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En La verdad obrera 580 damos cuenta junto a Gastón Ramírez de las últimas novedades de ayer, sobre la -hasta el momento- frustrada negociación, ya no entre los buitres y el gobierno, sino de los primeros con banqueros argentinos, para comprar los bonos en poder de los litigantes. Aunque algunos banqueros intentan proseguir las negociaciones, con el correr de las horas el default se hace más palpable.
A pesar del dramatismo que ha adquirido el suspenso sobre el default, para los trabajadores y el pueblo, lo verdaderamente catastrófico es continuar el ciclo de endeudamiento, acompañado de pagos "seriales". El gobierno ha hecho puntillosamente lo segundo, y se prepara para despedirse reiniciando otro ciclo de emisión de deuda. 

Invitamos a leer, acá.

miércoles, 30 de julio de 2014

Buitres: Sigue la negociación privada, hay posibilidad para que los K puedan continuar pagando serialmente

Aunque ha pasado la hora de cierre de la plaza neoyorquina, y con ella la posibilidad de que Argentina realizara pagos antes del horario trazado como límite, todavía no está dicha la última palabra. Los representantes de los bancos argentinos continúan negociando con los holdouts, en línea con el plan que comenzó a dibujarse ayer, que comentamos acá. En su conferencia de hoy, después del cierre de la negociación con Pollack, Kicillof teatralizó un completo desconocimiento de lo que los banqueros argentinos pudieran estar discutiendo con los bonistas en Nueva York. 



Aunque en lo formal el plazo límite está cumplido, de alcanzarse algún acuerdo de compra de bonos, los nuevos titulares de los bonos defaulteados podrían solicitar el restablecimiento del stay. El default "express", podría retrotraerse con cierta rapidez. No todos los analistas coinciden. Para Roque Fernandez, "Con la Argentina en default, todo se complica más". Por otro lado, "si los bancos privados compran la deuda al precio que la venden los bonistas, cabe preguntarse quién pagará la diferencia. Ahí no termina de cerrarme porque tendría que ingresar el Estado argentino, y podría afirmarse que es violatorio de la cláusula Rufo. No sé, no conozco". Quien dice esto, conoce de buenos negocios para bonistas, los gestionó durante los últimos años del gobierno de Menem. 


Pero Ámbito, sin embarog, anuncia que "se llegó hace minutos a un acuerdo para comprar el 100% de la deuda. Ayer ámbito.com había anticipadoque se estudiaban dos alternativas y finalmente se llegó a un acuerdo para que Argentina este sólo un tiempo corto en default". 


De concrentarse este anuncio, el default de unas horas no daría lugar a mayores consecuencias, más que algún que otro buen negocio para quien sepa aprovechar con "golpe de ojo" (o inside information) los vaivenes frenéticos de las cotizaciones al calor de las noticias. El gobierno argentino podrá seguir pagando serialmente, como lo viene haciendo, y se crearán condiciones para que todos los acreedores "holdout" empiecen a negociar, ahora con el stay y de cara a enero, al mismo tiempo que el gobierno negocia con los bonistas que canjearon la renuncia a la RUFO. El resultado cantado, va a ser un crecimiento de la deuda, por el reconomiento a todos los holdouts. Esto creará las condiciones para nuevo endeudamiento, y para abrirse a la entrada de capitales, sumamente interesados en meterse en algunos buenos negocios en la Argentina. Resta preocuparse por los costos de la "ayuda" de los banqueros, como analizamos acá.

Hay que dejar en claro, evitar este default no es un alivio para la clase trabajadora. No es, como dice Pollack en su comunicado, que el default tendrá graves consecuencias. Es pagar la deuda lo que tiene gravosas consecuencias para la clase trabajadora y el pueblo. Por eso es necesario declarar el no pago, junto a otra serie de medidas. Aunque se agitan muchos cucos sobre las consecuencias que esto podría tener, si es parte de un programa de conjunto (monopolio del comercio exterior, nacionalizaciòn de la banca bajo control de los trabajadores) puede asegurarse que no tendrá impactos severos sobre la clase trabajadora. 
Repetimos, más que nunca, debemos exigir que no sean el gobierno (camarilla que defiende los intereses de los capitalistas) y los banqueros, negociando con los buitres y los jueces imperiales, quienes comprometan nuestro futuro negociando entre cuatro paredes de espaldas a los trabajadores, abriendo paso a onerosas negociaciones que son el preámbulo de un nuevo crecimiento de la deuda. Como ha reclamado el diputado nacional por el Frente de Izquierda Nicolásdel Caño, es necesario abrir lugar a una consulta popular vinculante, para que sea el pueblo el que decida que se hace con la deuda.


Buitres: ¿Qué costos va a traer la “ayuda” de los banqueros?

En unas horas, gracias a la colecta de 250 millones de dólares en bonos para entregar como garantía a los bonistas holdouts, el banquero Jorge Brito pasó de traidor a héroe para el gobierno nacional. Camino inverso al recorrido hace unos años cuando el enfrentamiento con Guillermo Moreno y cruces de declaraciones con la Presidenta lo alejaron del lugar de preferencia que mantenía para el gobierno en el sector financiero. Ostracismo que nunca impidió, sin embargo, que el Banco Macro, que Brito preside, conservara tratos con Anses, realizando jugosos negocios. Tampoco, que al igual que el resto de la banca, realizara ganancias récord gracias a la política oficial. Bussiness are bussiness.

Ahora, el banquero puede adjudicarse el mérito de haber encolumnado a los banqueros locales, nucleados en Adeba, preocupados por las consecuencias que podría tener el default (por muy selectivo o restrictivo que pudiera ser), para que reúnan 250 millones de dólares en bonos con los cuales constituir un fideicomiso. Con este fideicomiso se buscaría negociar con los fondos buitre la compra de parte de sus tenencias de títulos en default. El objetivo de estas medidas sería lograr que los bonistas le soliciten al juez Thomas Griesa el restablecimiento del stay, cautelar que suspendería la sentencia de noviembre de 2012 y permitiría que el gobierno argentino cancele los vencimientos de hoy, evitando el default. Si esto ocurre, podría crearse un puente para llegar a enero, cuando argentina estaría en condiciones de negociar sin la amenaza de la cláusula RUFO (sigla en inglés para Derechos Sobre Futuras Ofertas) establecida en los bonos canjeados en 2005 y 2010, que les da derecho a participar de cualquier mejora en las condiciones que se otorgue a algún bonista antes de enero de 2015. En el interín, además, el gobierno podría intentar la renuncia por parte de los bonistas “performing” a la cláusula RUFO.

El ofrecimiento de una garantía por parte de los bancos privados nacionales permite superar una restricción establecida en el canje de 2005. La página 203 del prospecto del canje de 2005 establece textualmente que: “La Argentina se compromete a no crear ningún tipo de garantía (bajo cualquier condición de acuerdo preferencial) para asegurar el pago de su deuda, salvo que éste se ofrezca a la totalidad de los bonistas o que al menos cuente con la aprobación de éstos”. Con esta claúsula, el gobierno no podía ofrecer de forma directa ninguna garantía a los fondos buitre sin arriesgar consecuencias por parte de los bonistas que canjearon.

Si esto destrabará la situación, a horas del default, se conocerá dentro de un rato. De lo que podemos estar seguros, es que a los banqueros no los mueve ningún altruismo. Desde el vamos, podemos estar seguros que las mismas operaciones que realizarán para “salvar las papas” les van a generar ingresos por comisiones, además de evitarles las turbulencias que podría generar en el patriminio de sus bancos y en sus operaciones si la Argentina va a otro default.

Pero eso sería apenas el comienzo. Podemos imaginar que el éxito en las gestiones de hoy podría derivar en un recibimiento triunfal de Brito y sus socios por parte de la propia Presidenta, que poco tendría que envidiarle al que tuvo la selección nacional de fútbol el pasado 14 de julio. Sería el comienzo de una relación nuevamente más aceitada entre los banqueros y el gobierno. Esto pondría sobre el tapete la marcha atrás con algunas de las medidas que molestan al sector financiero, porque limitan la posibilidad de explayar libremente su voracidad. Una de ellas es el tope a las tasas de interés que pueden cobrar los bancos, fijadas el pasado 10 de junio en 37% para préstamos personales y 32% para prendarios en el caso de las entidades más grandes (para las entidades más pequeñas, la tasa de los créditos personales será 46% y los prendarios, 36%). También podrían buscar revertir las “nuevas reglas sobre comisiones y cargos de productos y servicios financieros básicos” que estableció el Banco Central (BCRA) junto con los topes, por las cuales los bancos y las emisoras no financieras de tarjetas de crédito tienen que solicitar autorización previa del BCRA para aplicar aumentos al costo. Estas medidas tuvieron por parte de los bancos una resistencia subterránea, consistente en empujar la salida de depositantes del sistema pagándoles tasas más bajas por sus plazos fijos, incentivando así la búsqueda de alternativas por parte de los ahorristas, lo cual amenazaba nuevamente con un salto del dólar blue. Es decir, la respuesta de los bancos a los intentos de regulación fue empujar hacia la desestabilización del precario equilibrio logrado por el gobierno a fuerza de devaluación y ajuste.

Otro punto que los bancos podrían llegar a reclamar, es la posibilidad de ampliar sus tenencias en moneda extranjera. En febrero pasado el BCRA reflotó una norma de 2005 que limita al 30% el patrimonio de tenencias en divisa que puede tener cada entidad financiera y al 10% adicional para los contratos de futuros. Esta medida fue aplicada después de la devaluación, no antes, y por eso los bancos, con tenencias que superaban holgadamente estos porcentajes, hicieron en pocos meses ganancias formidables. Sólo durante el primer trimestre de este año, los bancos amasaron el equivalente a la mitad de las ganancias de todo 2013, es decir $16.104 millones. Anualizado, esto significaría una duplicación de sus ganancias. El 60% de esas utilidades obedeció a ganancias por apuestas al dólar.

Y podemos estar seguros, ahora más que nunca, de que la reforma financiera, aspiración que otro banquero oficialista, Carlos Heller, busca sacar a relucir de vez en cuando para volver a archivarla ante la falta de apoyo oficial, es otra promesa sepultada del relato, junto con la inexistente reforma tributaria.

La gesta de pacotilla armada alrededor del litigio con los buitres, para ocultar la bancarrota de la estrategia de salir del problema de la deuda pagando serialmente, apunta a terminar en el grotesto, con la soberanía “rescatada” (con pago) de la mano de los banqueros. Soberanía limitada, por otra parte, al derecho de seguir pagando puntillosamente.

Ahora más que nunca, debemos exigir que no sean el gobierno (camarilla que defiende los intereses de los capitalistas) y los banqueros, negociando con los buitres y los jueces imperiales, quienes comprometan nuestro futuro negociando entre cuatro paredes de espaldas a los trabajadores, abriendo paso a onerosas negociaciones que son el preámbulo de un nuevo crecimiento de la deuda. Como ha reclamado el diputado nacional por el Frente de Izquierda Nicolásdel Caño, es necesario abrir lugar a una consulta popular vinculante, para que sea el pueblo el que decida que se hace con la deuda.

lunes, 28 de julio de 2014

domingo, 27 de julio de 2014

Buitres: rumbo al 30J (audios en Pateando el tablero)



Este sábado participamos en el programa Pateando el tablero, para discutir sobre las novedades producidas en el litigio con los fondos buitres que sustentan parte de los bonos "holdout" (que no entraron a los canjes) y obtuvieron un fallo favorable en la corte neoyorquina, revalidado por la corte suprema. Como producto de este fallo, el gobierno argentino viene impedido de cancelar los pagos de deuda regularizada, y si no hay novedades antes del próximo miércoles, todo iría rumbo a un default de al menos parte de la deuda regularizada. El panorama, y, sobre todo, los motivos de esta encerrona (un producto directo de la política K de cumplir puntillosamente con las finanzas globales), los analizamos en el programa. 

Para escuchar el audio, ir acá.